Frutas deshidratadas
Comprar fruta deshidratada online
En Campo de Benamayor, te ofrecemos una amplia selección de frutas deshidratadas para disfrutar de un snack saludable y delicioso en cualquier momento. Compra frutas como mango, piña, papaya o incluso pomelo y recíbelas envasadas y listas para consumir.
Fruta exótica deshidratada: Mango, papaya y muchas más
Estas dulces frutas dehidratadas son perfectas como aperitivo. Y naturalmente, como un ingrediente de categoría gourmet para cocinar y añadir a tus recetas.
Comprar frutas deshidratadas como: banana chips, arándanos secos, o jengibre cristalizado, además de otros sabores exóticos que encontrarás en nuestra tentadora selección, es sencillo, cómodo y rápido.
Es el momento de saborear nuestras suculentas fresas deshidratadas, o cualquier otro refrigerio como la piña, el mango, la papaya o el kiwi. Unas frutas ideales para añadir a tus platos, o simplemente para picotear. Te encantarán el sabor y la calidad de nuestras frutas.
Frutas deshidratadas de Málaga
Como habrás visto, somos productores de Pasas de Málaga e higos Pajareros secos y conocemos en profundidad la selección y el secado de la fruta. Es por eso que puedes confiar en nuestra experiencia, y encontrar en nuestra tienda online las mejores frutas deshidratadas entre la amplia variedad de productos y envases que te proponemos.
Frutas deshidratadas para llevar a cualquier parte
Las frutas desecadas son una excelente fuente de fibra de alta calidad y, por ejemplo, el contenido de una pequeña porción de manzana puede contener tanta como la manzana fresca entera, pero además no se estropea ni necesita frío para conservase.
Qué más debes saber antes de comprar frutas deshidratadas
Además del azúcar natural, fructosa o glucosa, que contienen las frutas en su estado original, existen algunas otras frutas secas que también llevan azúcar añadido (azúcar de caña). En estos casos se recomienda no abusar de su consumo ya que, si bien estas frutas tienen los mismos beneficios esenciales, un exceso de azúcar puede no ser necesariamente bueno dado el aumento de energía que produce.